Se acerca el fin de otro año, y ––como generalmente sucede cuando terminamos un ciclo–– es natural empezar a crearnos expectativas de lo que vendrá en el siguiente. Es común que veamos el nuevo número en el calendario como una oportunidad para mejorar, reinventarnos y crecer. Sin embargo, en muchas ocasiones nuestras metas son tan grandes que, conforme avanzan los meses, tendemos a dejarlas atrás. Si dentro de tus propósitos de año nuevo está cuidar de tu salud, te tenemos 24 propuestas más concretas de pequeñas cosas que puedes hacer para ayudar a tu bienestar emocional este nuevo ciclo.
La falta de exposición a la luz del día puede dañar desde nuestro reloj biológico del sueño hasta nuestra estabilidad emocional. Si casi no sales de tu casa, ponte como meta salir por lo menos diez minutos al día para recibir tu buena dosis de vitamina D e impulsar tu serotonina.
Tomarte un instante para respirar profundo cinco veces al día te ayudará a calmar tu sistema nervioso y reducir el estrés. ¿Nunca te acuerdas? Pon un recordatorio en tu teléfono a una hora que sepas que puedes darte un respiro.
Mantener un buen nivel de hidratación es fundamental para la salud física, sí, pero también para la mental. Tomar agua puede ser muy útil para sentirnos en calma y ayudarnos a manejar nuestras emociones. ¿Has visto esas botellas de agua que te dicen cuánto llevas en el día?
Somos seres sociales y, aunque a veces sintamos que preferimos estar en soledad, tenemos que recordarnos que es importante conectar con otros. Tip: pon en tu calendario «llamar a Fulanito» o «salir con Sultanito» e intenta cumplir el compromiso.
Enfocarnos una vez al día en las cosas que salieron bien, es muy útil para salir de la perspectiva negativa que a veces nubla nuestra visión. En Mindsurf, encontrarás un Diario emocional donde podrás plasmar los mejores momentos del día para voltear la mirada hacia las cosas buenas. ¡Incluso tiene un recordatorio!
¿Qué actividades te hacen feliz? ¿Qué tan seguido las haces? ¿Podrías incorporarlas a tu semana hasta convertirlas en rituales? Esto puede ser desde ir por un masaje hasta quedarte en casa y ver por la ventana. La cosa es que se convierta en un momento solo tuyo que puedes esperar con emoción.
Si aún no lo haces, puedes empezar este 2024. No necesitas 500 productos carísimos, solo necesitas un jabón neutro y una crema apta para la cara. Este hábito te ayudará a cuidar de ti y de tu cuerpo, lo que sin duda es muy útil cuando estás tratando de avivar tu amor propio. Date unos minutos en la noche para apapachar la piel en la que vives.
Si no acostumbras pedir una mano amiga cuando te sientes abrumado, quizá este ciclo puedas empezar a hacerlo. Recuerda que pedir ayuda no es sinónimo de debilidad, al contrario. Además, puedes empezar con pequeñas cosas, como pedir que te despierten por las mañanas.
Si tus listas de pendientes solo tienen cosas del trabajo o quehaceres, una buena idea sería incorporar a ellas actividades que disfrutes hacer. Esto ayudará a que tengas momentos en tu agenda que esperes con alegría.
Algunas investigaciones han demostrado que etiquetar nuestras emociones puede ayudarnos a reducir el estrés hasta en un 50%. Date tiempo para pensar en qué estás sintiendo y regístralo en el Diario emocional de Mindsurf. ¡Ni siquiera tienes que llevar una libreta contigo a todos lados!
Cuando uno vive en una gran ciudad, a veces puede ser sumamente difícil reencontrarse con la naturaleza. Sin embargo, la naturaleza puede generarnos alegría, creatividad, calma y ayudarnos a concentrarnos. Intenta hacer planes para visitar espacios naturales una vez al mes.
Quizá el propósito más común de año nuevo es «hacer ejercicio». No obstante, esta meta requiere de muchísima más disciplina de la que esperamos. Pero puedes empezar con algo más pequeño, como hacer estiramientos al lado de tu lugar de trabajo unos minutos al día para estimular la circulación y aumentar tus niveles de serotonina.
Ya tienes varios propósitos de año nuevo para este 2024 que son tan pequeños como importantes. Seguro algunos de estos podrán acoplarse a tu rutina y estilo de vida, pero si quieres ver más, ¡no te pierdas la segunda parte! El camino hacia el bienestar está a la vuelta de la esquina.